Consta en las crónicas del pasado siglo, que en el año 1908 de esta era
terrestre llego una comisión proveniente de un país situado en un lejano
continente.
Se dice que estas ilustres visitantes tenían las características exactas
de la comunidad de San Vicente de Paúl y esta similitud les hizo llegar y
quedar precisamente aquí, donde podían acercarse a los habitantes sin
problemas, hablar sus idiomas, reconocer sus signos, probar sus alimentos,
tomar su agua de lluvia que según la historia bebió una de las religiosas quien
estuvo a punto de morir y se encomendó al Arcángel San Rafael "MEDICINA DE
DIOS" y después de una penosa postración y feliz recuperación ofreció al
altísimo fundar una escuela bajo el amparo del ARCÁNGEL RAFAEL.
Su nombre SOR VICENTE MAYERS.
En efecto cuando se le preguntaba a ella y a otras dos religiosas. ¿QUÉ
HABÍAN VENIDO A BUSCAR? Siempre respondían que habían venido a servir al
prójimo en lo más que pudieran.
Así fueron llegando: Sor Luisa Pérez, Sor María Lugo, Sor Elena María
Tobón, Sor María Luisa Duque, Sor José Fina López, Sor Celina Mora, Sor María
Tamayo, de grata recordación para nuestros antepasados y luchadoras
inalcanzable por EL ANCIANATO SAN JOSÉ.
Fueron descubriendo muchísimas cosas que interesaron tanto a las
hermanas, que aquí se quedaron en la CALLE 6° " LA LOMA" entre
la Sor Vázquez, calle Cundinamarca, en un caserón de madera por donde se
entraba después de traspasar un portón alto y de madera se visitaba un hermosa
capilla donde adorábamos a Dios y luego recorríamos sus amplios salones y
tratábamos de espiar como era la vida conventual pues las religiosas vivían
también en este lugar.
De este modo, se volvieron incansables caminantes que iban y
venían por la isla, recorrían las calles más lejanas como Mayolo, Sacapeña.
Coleccionaban objetos, palabras, historias y recuerdos para sus conversaciones;
a veces se lanzaban por calles empedradas y empinadas como el embudo, los
tubos, o el jabón, en busca de enfermos a quienes soliviar, otras veces se
metían en el microcosmo de las familias que así les permitían. En eso consistía
la vida de la comunidad, en esa vieja casona con cisterna y árbol de naranjo
agrio, custodiado por el Arcángel Rafael y nuestra señora de la medalla
milagrosa.
Sus estudiantes todos de sexo femenino estudiábamos en doble jornada
aprendimos las asignaturas del pensum oficial además de las manualidades
costuras o canto.
El domingo no faltaba la santa misa, En la comunidad y con uniforme de
gala azul, camisa manga larga blanca, un zuavo y boina de un mismo tono, zapatos
negros y negras tobilleras blancas.
Ese era su principal trabajo además de catequizar a las alumnas.
Un buen día, nuestra pregunta es ¿cuáles son los símbolos de
nuestra institución? Gracias a las maestras Carmen Cecilia Guerrero de
Ortiz y Amalia Rosa Angulo Delgado escriben la letra de nuestro himno con
acordes musicales del señor Gerardo Dorronsoro.
La bandera y el Escudo son orgullo y emblemas de las gentes de nuestra
región, nos invitan a seguir siendo justos y responsables, es creación de un
grupo de docentes: Luz Colombia Hurtado de Vivas, Betty Cortés Prettel, Dora
Dally Garcés Valencia y Ana Dolores Peña Estupiñán.
Al iniciar el nuevo milenio gracias al empuje de la señora Rectora de la
época Beatriz Panchano Mena quién creyó y apoyó incondicionalmente a sus
docentes, San Rafael cuenta hoy gracias a Dios, a la organización People on
Line, al doctor López Trujillo, doctora Yolanda Llanos y a la fundación Fabio
Grisales Bejarano con una moderna Salas de Sistemas e Internet para utilidad de
los estudiantes y comunidad en general, siendo pionera de las
famosas Infoaulas Pacíficas la docente Ana Dolores peña Estupiñán quién les
habla.
Gracias también a UNIVALLE, GRUPO CINARA, a las docentes Mercy Ascensión
Santana y Ana Dolores Peña Estupiñán, por haber logrado la dotación,
adecuación de modernas baterías sanitarias, la buena gestión es la que hace más
fáciles las cosas.
Es así que un siglo que va llegando al ocaso dejándonos a cada uno
recuerdos imborrables, así como unas ventanas abiertas para las nuevas
esperanzas de la vida escolar que les espera.
Son tantas esas ventanas que he querido tomar algunas de ellas, para introducir
en sus corazones mensajes de amor, respeto y gratitud.
A través de una de ellas quiero decirles que todos sus anhelos aún por
realizar sean orgullosas acciones en esa vida que hoy continúa, así mismo que
aquellos dolores y desilusiones desbordados en lágrimas y tristezas sean
llevados a los linderos del olvido.
Por otra parte, tengo un presente muy especial que quiero darles con
mucho cariño, sabiendo de antemano será para ustedes motivo de reflexión y
cambio para un mejor porvenir.
Es precisamente esta Institución Educativa San Rafael donde se refleja
el papel del verdadero maestro, aquel que comparte con amor y devoción sus
conocimientos como una luz que llega a iluminar mentes que desean ver con
claridad los senderos por recorrer.
¿Quiénes conforman la tripulación? En el año 2002 el programa se inició
con la integración de doce (12) jóvenes discapacitados auditivos al grado 6°
con un intérprete, posteriormente se hizo el nombramiento de los intérpretes
para los discapacitados auditivos y una docente con la misma discapacidad , la
modalidad del servicio es estimado, la institución atiende una población
de niños y jóvenes con licitaciones auditivas, nivel socio económico,
medico bajo en retraso escolar por problemas de
comunicación oral discriminados socialmente, a causa de su limitación, con
convivir afectivos y convertirse con alta dependencia familiar, baja autoestima
y conductas de agresividad. Hoy existen 27 estudiantes en la básica primaria y
36 educandos en la básica media con discapacidad auditiva, en el bachillerato
docentes de todas las asignaturas son intérpretes, uno por nivel, dos docentes
de apoyo y cuatro modelos lingüísticos sordos adultos.
Apoyado por el INSOR-FENACOL I.C.B.F,
un fonoaudiólogo, un psicólogo, un entrenador de danzas, un profesor de
edu. Física y padres de familia de los estudiantes discapacitados.
EVALUACIÓN: Ha sido un proceso lento con dificultades como, extra edad
de algunos educandos con limitaciones auditivas, reconocimiento del L.S.C, la
poca aceptación hacia el aprendizaje del español escrito dependiendo más de las
actividades que se realizan al L.S.C, carencia de material didáctico adecuado
debido a que el mayor estímulo para el discapacitado auditivo es el lenguaje visual,
el no nombramiento y pago oportuno de intérpretes edemas de falta de asesoría por
la Secretaria de Educación Municipal.
No todo es color gris, se observa gran interés en los grados 4° y 5° por
aprender el español escrito, algunos se esfuerzan a tal grado de escribir y
leer por iniciativa propia.
Las dos promociones anteriores de bachilleres han graduado estudiantes
sordos con énfasis en ensamble y mantenimiento de computadores quienes
demuestran gran habilidad en esta área.
Es claro comentar: en la propuesta bilingüe los estudiantes con
discapacidad auditiva no manejan lengua extranjera sin embargo continuamos con
el proceso.
Tal vez por razones históricas y culturales se valora y se te hace apología
a la idea que hay que luchar, sufrir y esforzarse, aunque sea ficticiamente,
para valorar las cosas donde hay que prestar favores para obtener algo a lo que
se tiene derecho, nos hemos acostumbrado a que se nos maltrate ante situaciones
algo problemáticas, por alguien que empecinadamente dice: “Es que las cosas son
así” “Yo que culpa tengo, no puedo hacer nada” y por nuestra parte también a ponerle
trabillas a los que puede fluir fácilmente.
El 4 de septiembre del 2002 los jóvenes en situación de discapacidad
auditiva de la sede Federico Bayter se fusionaron con la Institución Educativa
San Rafael por el decreto 1305 de 2002. Siendo la rectora la licenciada Beatriz
Panchano quien asume la representación legal de la institución y como coordinadora
del Bayter la licenciada Ismenia Paredes
desde este momento que se realiza la fusión se inicia el programa de integración
de los niños no oyentes al aula regular de clase en el nivel de bachillerato
luchando, contra viento y marea para que estos lograran el proceso de adaptación
es así como hemos logrado navegar con ellos hasta la fecha.
SAN RAFAEL CIENTO CINCO (105) AÑOS SEMBRANDO SEMILLAS DEL SABER